Sorpresa mayúscula en El All England. Andy Murray no pudo con Sam Querrey y quedó eliminado. Además, abandonó Novak Djokovic. Pero Roger Federer ganó sin mayores problemas y está a dos pasos de su octavo Wimbledon.
Federer, siete veces campeón aquí, tuvo menos problemas de lo imaginado para eliminar a Milos Raonic, el último finalista. La última vez que se habían enfrentado fue precisamente en aquel Wimbledon 2016, cuando el canadiense eliminó al suizo. Esta vez, la situación fue distinta. Fue 6-4, 6-2 y 7-6 (4) para el suizo que demostró la misma solidez que en los últimos diez días.
Novak Djokovic, mientras tanto, volvía a estar entre los ocho últimos supervivientes pero su físico dijo basta. Tomas Berdych, finalista de 2010 y semifinalista el último año, ya defendió los puntos al aprovechar el retiro del serbio que se despidió cuando el checo vencía por 7-6 (2) y 2-0.
Más temprano Murray tampoco pudo superar problemas físicos y cedió ante Sam Querrey. Fue 3-6, 6-4, 6-7 (4), 6-1 y 6-1 para el norteamericano ante el vigente campeón. De esta manera, Querrey repite un golpe similar al de 2016, cuando venció a Novak Djokovic en tercera ronda. En ambos casos, su rival era el principal sembrado del torneo.
Querrey, además, se transforma en el primer estadounidense desde 2009 en llegar a semifinales de un Grand Slam. El último, Andy Roddick, también lo consiguió en Wimbledon. El ganador ahora se verá con Marin Cilic, que eliminó Gilles Muller, verdugo de Rafael Nadal, por 3-6, 7-6 (6), 7-5, 5-7 y 6-1.
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