Lo resolvió el juez federal Sergio Torres, que embargó al ex funcionario por 15 millones de pesos
El juez federal Sergio Torres procesó a Ricardo Echegaray por administración fraudulenta en perjuicio del Estado y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, debido al modo en que se entregó en el año 2011 una licitación para la limpieza del edificio central de la AFIP. El magistrado dispuso además un embargo de 15 millones de pesos al ex titular de ese organismo durante buena parte del kirchnerismo.
La empresa "Limpiolux" ganó la licitación 99/10 por un monto de $15.196.000, el doble de lo que había ofertado la empresa Ricardo Bilbao, que fue apartada del proceso licitatorio y que venía limpiando el edificio de la AFIP desde el año 1981. El presupuesto establecido por AFIP era de 14.800.000 de pesos para el contrato de limpieza, pero lo pagó más caro.
Torres procesó también a Cecilia Peluso, quien por entonces estaba al frente de la empresa Limpiolux como partícipe necesario de los mismos delitos que Echegaray. Ademas el juez dictó nueve procesamientos para quienes desde la Comisión Evaluadora que actuó en la licitación y a jefes de las áreas de Intendencia y Asuntos jurídicos de la AFIP que participaron del proceso bajo investigación.
El juez les fijó un embargo a Echegaray y Peluso de $15.000.000 y al resto de los procesados de $1.000.000.
El juez federal Sergio Torres procesó a Ricardo Echegaray por administración fraudulenta en perjuicio del Estado y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, debido al modo en que se entregó en el año 2011 una licitación para la limpieza del edificio central de la AFIP. El magistrado dispuso además un embargo de 15 millones de pesos al ex titular de ese organismo durante buena parte del kirchnerismo.
La empresa "Limpiolux" ganó la licitación 99/10 por un monto de $15.196.000, el doble de lo que había ofertado la empresa Ricardo Bilbao, que fue apartada del proceso licitatorio y que venía limpiando el edificio de la AFIP desde el año 1981. El presupuesto establecido por AFIP era de 14.800.000 de pesos para el contrato de limpieza, pero lo pagó más caro.
Torres procesó también a Cecilia Peluso, quien por entonces estaba al frente de la empresa Limpiolux como partícipe necesario de los mismos delitos que Echegaray. Ademas el juez dictó nueve procesamientos para quienes desde la Comisión Evaluadora que actuó en la licitación y a jefes de las áreas de Intendencia y Asuntos jurídicos de la AFIP que participaron del proceso bajo investigación.
El juez les fijó un embargo a Echegaray y Peluso de $15.000.000 y al resto de los procesados de $1.000.000.
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