La localidad de El Galpón fue la más afectada. Hay 18 casas destruidas y otras 40 con fisuras. Habló el sobrino de la única víctima mortal. Hubo más de 30 heridos
"Hubo 18 casas destruidas, 15 quedaron en estado deplorable y otras 40 con fisuras". El cruel resumen del intendente de la localidad salteña de El Galpón, Héctor Romero, grafica lo que dejó el temblor de 5,9 grados que impactó hoy a las 8.33 de la mañana en Salta y se sintió en las provincias vecinas.
Pero como dijo el sobrino de la única víctima mortal, "el daño material es lo de manos". Alberta Flores, una docente –ya jubilada– muy querida en la comuna en la que viven unas 7 mil personas, murió aplastada por un muro de su casa que se desplomó mientras dormía en la cama en la que estaba postrada, ya que no se podía mover por sus propios medios. Tenía 94 años.
El sobrino, Pedro Argañaraz, contó a La Gaceta cómo vivió el temblor. "Sentí un sacudón tremendo, me levanté rápido y los desperté a mi esposa y a mi hijo. Nos paramos en el marco de la puerta. Se caían cosas desde el techo, había polvo por todos lados. El ruido era terrorífico", recordó el hombre, que logró sacar al resto de familia a un jardín interno.
"Hubo 18 casas destruidas, 15 quedaron en estado deplorable y otras 40 con fisuras". El cruel resumen del intendente de la localidad salteña de El Galpón, Héctor Romero, grafica lo que dejó el temblor de 5,9 grados que impactó hoy a las 8.33 de la mañana en Salta y se sintió en las provincias vecinas.
Pero como dijo el sobrino de la única víctima mortal, "el daño material es lo de manos". Alberta Flores, una docente –ya jubilada– muy querida en la comuna en la que viven unas 7 mil personas, murió aplastada por un muro de su casa que se desplomó mientras dormía en la cama en la que estaba postrada, ya que no se podía mover por sus propios medios. Tenía 94 años.
El sobrino, Pedro Argañaraz, contó a La Gaceta cómo vivió el temblor. "Sentí un sacudón tremendo, me levanté rápido y los desperté a mi esposa y a mi hijo. Nos paramos en el marco de la puerta. Se caían cosas desde el techo, había polvo por todos lados. El ruido era terrorífico", recordó el hombre, que logró sacar al resto de familia a un jardín interno.
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