Sergio Romero generaba dudas en los meses previos al inicio del Mundial de Brasil. Que no juega seguido en el Mónaco, que hay otros arqueros que tienen más contuinidad, que habría que probar a otros con mejores rendimientos... Sin embargo, y contra todos los pronósticos, el 1 de la Selección fue importante en el triunfo por 2-1 frente a Bosnia y crucial en el choque frente a Irán.
"Gracias a Dios, el Enano (Messi) frotó la lámpara en el último minuto. Sabíamos que iba a ser duro y trabado. Tuvieron muchos jugadores en su campo, costó entrar. Yo trato de ayudar a mis compañeros, pude poner las manos y la pelota no entró", declaró después del ajustado triunfo.
A los 7 minutos del segundo tiempo, en una contra de Irán, Montazeri desbordó por derecha y mandó un centro para Ghoochannejhad, que anticipó a Fernández con una palomita. 'Chiquito' estaba bien ubicado bajo los tres palos y agigantó su figura para negarle el gol a los persas.
Enseguida, a los 12, Dejagah le ganó a Zabaleta y otra vez Romero, formidable, se estiró y la sacó con la punta de los dedos. ¿Más? Sí, Ghoochannejhad volvió a sacar ventajas en velocidad, Mascherano no alcanzó a cerrar sin infracción y Ro-me-ro puso las manos para despejar un zurdazo con destino de gol. Cuando todos los flashes apuntaban a los '4 Fantásticos', el arquero del Mónaco, además de haber alcanzado un récord, sacó a relucir su buen presente.
Goal.com
"Gracias a Dios, el Enano (Messi) frotó la lámpara en el último minuto. Sabíamos que iba a ser duro y trabado. Tuvieron muchos jugadores en su campo, costó entrar. Yo trato de ayudar a mis compañeros, pude poner las manos y la pelota no entró", declaró después del ajustado triunfo.
A los 7 minutos del segundo tiempo, en una contra de Irán, Montazeri desbordó por derecha y mandó un centro para Ghoochannejhad, que anticipó a Fernández con una palomita. 'Chiquito' estaba bien ubicado bajo los tres palos y agigantó su figura para negarle el gol a los persas.
Enseguida, a los 12, Dejagah le ganó a Zabaleta y otra vez Romero, formidable, se estiró y la sacó con la punta de los dedos. ¿Más? Sí, Ghoochannejhad volvió a sacar ventajas en velocidad, Mascherano no alcanzó a cerrar sin infracción y Ro-me-ro puso las manos para despejar un zurdazo con destino de gol. Cuando todos los flashes apuntaban a los '4 Fantásticos', el arquero del Mónaco, además de haber alcanzado un récord, sacó a relucir su buen presente.
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