Se realizó en un cementerio judio de Buenos Aires.
Familiares y allegados del fiscal argentino Alberto Nisman celebraron hoy en un cementerio judío de Buenos Aires una ceremonia privada para conmemorar los dos años de su misteriosa muerte, ocurrida cuatro días después de presentar una polémica denuncia contra la entonces presidenta, Cristina Fernández.
Según explicó a Efe el rabino y ministro de Ambiente de Argentina, Sergio Bergman, que participó en el homenaje, se trató de una ceremonia "muy reservada e íntima" frente a su tumba.
En el acto en el cementerio de La Tablada, en el oeste de la capital, estuvieron la madre del fiscal, Sara Garfunkel, la hermana, Sandra, las hijas, Iara y Kala, y su exmujer, Sandra Arroyo, junto a otros familiares y amigos.
En el homenaje, que transcurrió conforme a la tradición judía y estuvo encabezado por el rabino Marcelo Polakoff, se recitaron salmos y oraciones, pero no se leyeron ni narraron otras palabras ni dedicatorias "para preservar solo el ámbito espiritual", añadió Bergman.
"Es un día especial, estamos movilizados y conmovidos. Son dos años que pasaron", afirmó el ministro.
Por otro lado, en la tarde de este miércoles y bajo el lema "Justicia por Nisman. Donde hay memoria hay justicia. Estar es recordar" se realizará otro acto pero esta vez público, en el centro de Buenos Aires y frente a la sede de la Fiscalía especial de investigación del atentado a la AMIA de 1994, que dirigía Nisman.
En ese caso, además de los cercanos al fiscal, se espera la presencia de ciudadanos que quieran unirse al homenaje, en el que se volverá a reclamar Justicia para que se esclarezca su muerte, que aún hoy se desconoce si fue un suicidio o un asesinato, como sostienen los allegados.
"Planteando que lo que muchos cuando lo mataron decíamos que lo mataron hoy está asumido como una línea de investigación en la reorientación de la causa de su muerte. Algunos hace dos años ya hablábamos de asesinato y nos criticaban", añadió Bergman.
Nisman fue hallado muerto el 18 de enero de 2015 con un tiro en la cabeza, poco días después de denunciar a la entonces presidenta argentina, Cristina Fernández (2007-2015), por supuesto encubrimiento a los iraníes acusados por el ataque en a la sede de la mutua judía AMIA, en el que murieron 85 personas.
A finales de 2016, la Cámara Federal de Casación Penal ordenó reabrir esa querella, que había sido archivada en varias instancias, y el caso recayó en el juez federal Ariel Lijo, quien debe investigar si, tal como lo denunció Nisman, el Gobierno kirchnerista negoció con Irán el encubrimiento de los supuestos responsables iraníes del atentado a cambio de impulsar el comercio bilateral.
Además, en la investigación a la muerte de Nisman, caso a cargo del juez Julián Ercolini, se ha constituido una junta interdisciplinaria que buscará determinar las causas del fallecimiento y cuyo trabajo estaría finalizado para mediados de este año.
Familiares y allegados del fiscal argentino Alberto Nisman celebraron hoy en un cementerio judío de Buenos Aires una ceremonia privada para conmemorar los dos años de su misteriosa muerte, ocurrida cuatro días después de presentar una polémica denuncia contra la entonces presidenta, Cristina Fernández.
Según explicó a Efe el rabino y ministro de Ambiente de Argentina, Sergio Bergman, que participó en el homenaje, se trató de una ceremonia "muy reservada e íntima" frente a su tumba.
En el acto en el cementerio de La Tablada, en el oeste de la capital, estuvieron la madre del fiscal, Sara Garfunkel, la hermana, Sandra, las hijas, Iara y Kala, y su exmujer, Sandra Arroyo, junto a otros familiares y amigos.
En el homenaje, que transcurrió conforme a la tradición judía y estuvo encabezado por el rabino Marcelo Polakoff, se recitaron salmos y oraciones, pero no se leyeron ni narraron otras palabras ni dedicatorias "para preservar solo el ámbito espiritual", añadió Bergman.
"Es un día especial, estamos movilizados y conmovidos. Son dos años que pasaron", afirmó el ministro.
Por otro lado, en la tarde de este miércoles y bajo el lema "Justicia por Nisman. Donde hay memoria hay justicia. Estar es recordar" se realizará otro acto pero esta vez público, en el centro de Buenos Aires y frente a la sede de la Fiscalía especial de investigación del atentado a la AMIA de 1994, que dirigía Nisman.
En ese caso, además de los cercanos al fiscal, se espera la presencia de ciudadanos que quieran unirse al homenaje, en el que se volverá a reclamar Justicia para que se esclarezca su muerte, que aún hoy se desconoce si fue un suicidio o un asesinato, como sostienen los allegados.
"Planteando que lo que muchos cuando lo mataron decíamos que lo mataron hoy está asumido como una línea de investigación en la reorientación de la causa de su muerte. Algunos hace dos años ya hablábamos de asesinato y nos criticaban", añadió Bergman.
Nisman fue hallado muerto el 18 de enero de 2015 con un tiro en la cabeza, poco días después de denunciar a la entonces presidenta argentina, Cristina Fernández (2007-2015), por supuesto encubrimiento a los iraníes acusados por el ataque en a la sede de la mutua judía AMIA, en el que murieron 85 personas.
A finales de 2016, la Cámara Federal de Casación Penal ordenó reabrir esa querella, que había sido archivada en varias instancias, y el caso recayó en el juez federal Ariel Lijo, quien debe investigar si, tal como lo denunció Nisman, el Gobierno kirchnerista negoció con Irán el encubrimiento de los supuestos responsables iraníes del atentado a cambio de impulsar el comercio bilateral.
Además, en la investigación a la muerte de Nisman, caso a cargo del juez Julián Ercolini, se ha constituido una junta interdisciplinaria que buscará determinar las causas del fallecimiento y cuyo trabajo estaría finalizado para mediados de este año.
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