El rey Felipe VI prometió hoy a los españoles "una monarquía renovada para un tiempo nuevo", en el discurso de proclamación que pronunció en el Congreso de los Diputados , en Madrid, fijando las líneas de su reinado.
"La celebración de este acto de tanta trascendencia histórica se une a mi convicción de que la monarquía parlamentaria debe seguir prestando servicio a España", dijo defendiendo su contribución política.
El rey hizo una defensa cerrada de la monarquía, en un momento en el que voces republicanas reivindican un referéndum. Reconoció el cambio y transformación sitúa a su reinado en una realidad distinta a la del siglo XX.
En un llamado a la unidad expresó: "La Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, saber ganarse continuamente su aprecio, su respeto y su confianza y para ello, velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente, porque solo de esa manera, se hará acreedora de la autoridad moral necesaria para el ejercicio de sus funciones", señaló el nuevo rey.
LA CRISIS
El flamante monarca se refirió a las demandas ciudadanas "con toda razón" y puntualizó: "Los principios morales y éticos inspiran la vida pública. El Rey, a la cabeza del Estado, tiene que ser no sólo un referente sino también un servidor de esa justa y legítima exigencia de los ciudadanos". En ese contexto llamó a trabajar todos juntos con lealtad por los desafíos del siglo XXI.
El flamante monarca instó a renunciar al inconformismo: "Mirar más allá y por encima de nosotros mismos".
Duarante su discurso remarcó a la ciencia e investigación como creadoras de riqueza, "todo ello es imprescindible para el progreso de España".
EL SALUDO
Con un guiño a la pluralidad lingüística del país, al dar las gracias en el saludo tras el discurso, lo hizo en castellano, catalán, euskera y gallego. Muchas gracias. Moltes gràcies. Eskerrik asko. Moitas grazas.
LA FAMILIA REAL
Felipe llegó al trono en medio de una crisis de prestigio de la monarquía, cuestionada y golpeada por el caso de corrupción que protagoniza su cuñado y que salpica a su propia hermana Cristina, imputada por la Justicia.
Este hombre hereda el delicado desafío de revertir el desprestigio de la corona y de mediar para encauzar la triple crisis, económica y territorial que atraviesa el país.
EL DISCURSO:
TEXTO COMPLETO:
"La celebración de este acto de tanta trascendencia histórica se une a mi convicción de que la monarquía parlamentaria debe seguir prestando servicio a España", dijo defendiendo su contribución política.
El rey hizo una defensa cerrada de la monarquía, en un momento en el que voces republicanas reivindican un referéndum. Reconoció el cambio y transformación sitúa a su reinado en una realidad distinta a la del siglo XX.
En un llamado a la unidad expresó: "La Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, saber ganarse continuamente su aprecio, su respeto y su confianza y para ello, velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente, porque solo de esa manera, se hará acreedora de la autoridad moral necesaria para el ejercicio de sus funciones", señaló el nuevo rey.
LA CRISIS
El flamante monarca se refirió a las demandas ciudadanas "con toda razón" y puntualizó: "Los principios morales y éticos inspiran la vida pública. El Rey, a la cabeza del Estado, tiene que ser no sólo un referente sino también un servidor de esa justa y legítima exigencia de los ciudadanos". En ese contexto llamó a trabajar todos juntos con lealtad por los desafíos del siglo XXI.
El flamante monarca instó a renunciar al inconformismo: "Mirar más allá y por encima de nosotros mismos".
Duarante su discurso remarcó a la ciencia e investigación como creadoras de riqueza, "todo ello es imprescindible para el progreso de España".
EL SALUDO
Con un guiño a la pluralidad lingüística del país, al dar las gracias en el saludo tras el discurso, lo hizo en castellano, catalán, euskera y gallego. Muchas gracias. Moltes gràcies. Eskerrik asko. Moitas grazas.
LA FAMILIA REAL
Felipe llegó al trono en medio de una crisis de prestigio de la monarquía, cuestionada y golpeada por el caso de corrupción que protagoniza su cuñado y que salpica a su propia hermana Cristina, imputada por la Justicia.
Este hombre hereda el delicado desafío de revertir el desprestigio de la corona y de mediar para encauzar la triple crisis, económica y territorial que atraviesa el país.
EL DISCURSO:
TEXTO COMPLETO:
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