La organización terrorista efectuó otra de sus ejecuciones públicas en nombre de la ley sagrada. Esta vez asesinaron a un grupo de jóvenes por mantener relaciones sexuales adúlteras.
El grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) lapidó hasta la muerte a una mujer y a 20 jóvenes varones en la ciudad de Mosul, en el norte de Irak, por haber mantenido supuestas relaciones ilegítimas, informó a Efe un responsable local.
Antes de proceder a la lapidación, uno de los yihadistas leyó un comunicado del denominado tribunal religioso de ISIS frente a una multitud que fue obligada por la fuerza a presenciar el asesinato en ese lugar público.
El jefe del Comité de Derechos Humanos del Consejo de la provincia de Nínive, Gazuan Hamed al Daudi, denunció que agentes de la hesba (la policía de ISIS) mataron de una sola vez a todas las víctimas en el barrio de Al Tahrir, frente a la mezquita al Zahrá, en el este de Mosul.
Los yihadistas arrojaron piedras contra las víctimas durante una hora, hasta provocarles la muerte, y sus cuerpos fueron trasladados posteriormente al depósito de cadáveres de Mosul.
Al Daudi reveló que, según informaciones recibidas por su comité, un total de 90 jóvenes iban a ser ejecutados, pero ISIS se limitó a matar a 21 personas para que sirva de escarmiento y con el objetivo de "impedir la práctica de la prostitución y la fornicación", según el comunicado del grupo yihadista.
El grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) lapidó hasta la muerte a una mujer y a 20 jóvenes varones en la ciudad de Mosul, en el norte de Irak, por haber mantenido supuestas relaciones ilegítimas, informó a Efe un responsable local.
Antes de proceder a la lapidación, uno de los yihadistas leyó un comunicado del denominado tribunal religioso de ISIS frente a una multitud que fue obligada por la fuerza a presenciar el asesinato en ese lugar público.
El jefe del Comité de Derechos Humanos del Consejo de la provincia de Nínive, Gazuan Hamed al Daudi, denunció que agentes de la hesba (la policía de ISIS) mataron de una sola vez a todas las víctimas en el barrio de Al Tahrir, frente a la mezquita al Zahrá, en el este de Mosul.
Los yihadistas arrojaron piedras contra las víctimas durante una hora, hasta provocarles la muerte, y sus cuerpos fueron trasladados posteriormente al depósito de cadáveres de Mosul.
Al Daudi reveló que, según informaciones recibidas por su comité, un total de 90 jóvenes iban a ser ejecutados, pero ISIS se limitó a matar a 21 personas para que sirva de escarmiento y con el objetivo de "impedir la práctica de la prostitución y la fornicación", según el comunicado del grupo yihadista.
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