Lo dispuso el juez Sergio Moro. Es por corrupción y lavado de dinero. Es el primer presidente en la historia de Brasil en ser condenado por esos delitos
El expresidente brasileño Lula da Silva fue condenado esta tarde a nueve años y medio de prisión por el juez Sergio Moro, de primera instancia, a raíz de su implicación en la red de corrupción que operó en Petrobras. La sentencia dictada por el responsable de la investigación en la trama corrupta sobre la petrolera estatal encontró a Lula como culpable en los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero. Según el juez, desvió 87 millones de reales.
La acusación formal comenzó hace diez meses, en el que los investigadores llegaron a calificar a Lula de ser el "jefe" del esquema de corrupción montado en Petrobras. Según la acusación, el ex mandatario recibió un apartamento de tres pisos en el balneario de Guarujá, en San Pablo, valorado en 1.1 millones de reales, y recibió en total 3.7 millones de reales en ventajas indebidas pagadas por la constructora OAS.
Lula habría recibido esa vivienda en concepto de soborno, es decir, a cambio de "favores" hechos desde el poder a esa compañía constructora.
De todos modos, hasta que la sentencia sea ratificada en segunda instancia, Lula se puede presentar como candidato para las elecciones generales del 2018. De hecho, actualmente aparece como líder en las encuestas. Él expresó en varias oportunidades su deseo de volver a competir por la presidencia.
Además de las causas ya abiertas, Lula puede llegar a ser investigado en otros seis procesos más, según solicitó la Corte Suprema con base en confesiones hechas por exdirectivos del grupo Odebrecht, y también está salpicado por revelaciones de ejecutivos del grupo cárnico JBS.
El expresidente brasileño Lula da Silva fue condenado esta tarde a nueve años y medio de prisión por el juez Sergio Moro, de primera instancia, a raíz de su implicación en la red de corrupción que operó en Petrobras. La sentencia dictada por el responsable de la investigación en la trama corrupta sobre la petrolera estatal encontró a Lula como culpable en los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero. Según el juez, desvió 87 millones de reales.
La acusación formal comenzó hace diez meses, en el que los investigadores llegaron a calificar a Lula de ser el "jefe" del esquema de corrupción montado en Petrobras. Según la acusación, el ex mandatario recibió un apartamento de tres pisos en el balneario de Guarujá, en San Pablo, valorado en 1.1 millones de reales, y recibió en total 3.7 millones de reales en ventajas indebidas pagadas por la constructora OAS.
Lula habría recibido esa vivienda en concepto de soborno, es decir, a cambio de "favores" hechos desde el poder a esa compañía constructora.
De todos modos, hasta que la sentencia sea ratificada en segunda instancia, Lula se puede presentar como candidato para las elecciones generales del 2018. De hecho, actualmente aparece como líder en las encuestas. Él expresó en varias oportunidades su deseo de volver a competir por la presidencia.
Además de las causas ya abiertas, Lula puede llegar a ser investigado en otros seis procesos más, según solicitó la Corte Suprema con base en confesiones hechas por exdirectivos del grupo Odebrecht, y también está salpicado por revelaciones de ejecutivos del grupo cárnico JBS.
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