El Matador jugó un partido bárbaro, golpeó en los momentos justos y pasó por arriba a la Academia: con goles de Itabel, Wílchez y Godoy, venció 4 a 0.
El arranque era promotedor. Con sólo dos fechas jugadas, parecía que Racing se perfilaba para ser un claro candidato a quedarse con el título. Hasta que tuvo que viajar a Victoria y encontrarse con Tigre, que le dio una lección de fútbol a un equipo que nunca pudo encontrarse en la cancha.
Hay que decir que el Matador supo golpear en los momentos indicados y aprovechó cada situación de gol que tuvo, con una eficacia pocas veces antes vista. La defensa de la Academia dejó mucho que desear a lo largo de los 90 minutos y, cada vez que los de Fabián Alegre se adelantaban en el campo, daba la sensación que la pelota podía terminar adentro del arco.
A los 10 minutos, Godoy metió el 1 a 0 de cabeza y abrió la historia. Hasta ahí, la cosa estaba pareja, pero ese tanto destrabó el choque. Los de Diego Cocca fueron a buscar el empate, pero dejó unos huecos tremendos atrás y el local se aprovechó. Sobre el final de la primera parte, a los 40', Itabel, una de las figuras del encuentro, metió el 2 a 0.
Y como si eso fuera poco, ni bien empezaron los segundo 45 minutos, Wílchez se despachó con un golazo. Quedó mano a mano con Nico Sánchez, lo dejó en el camino, y la metió en el palo más lejano de Saja. Era 3 a 0 al minuto de juego de la segunda parte y partido liquidado. Luego, habría tiempo para que Itabel meta otro gol más y cerrase el resultado.
Un 4 a 0 que duele, pero que devuelve a Racing a la realidad y le permite pensar con mayor claridad a falta de 16 fechas por disputar. A Tigre, entre tanto, el resultado lo ilusiona y, si sigue jugando así, puede meterse en la pelea.
El arranque era promotedor. Con sólo dos fechas jugadas, parecía que Racing se perfilaba para ser un claro candidato a quedarse con el título. Hasta que tuvo que viajar a Victoria y encontrarse con Tigre, que le dio una lección de fútbol a un equipo que nunca pudo encontrarse en la cancha.
Hay que decir que el Matador supo golpear en los momentos indicados y aprovechó cada situación de gol que tuvo, con una eficacia pocas veces antes vista. La defensa de la Academia dejó mucho que desear a lo largo de los 90 minutos y, cada vez que los de Fabián Alegre se adelantaban en el campo, daba la sensación que la pelota podía terminar adentro del arco.
A los 10 minutos, Godoy metió el 1 a 0 de cabeza y abrió la historia. Hasta ahí, la cosa estaba pareja, pero ese tanto destrabó el choque. Los de Diego Cocca fueron a buscar el empate, pero dejó unos huecos tremendos atrás y el local se aprovechó. Sobre el final de la primera parte, a los 40', Itabel, una de las figuras del encuentro, metió el 2 a 0.
Y como si eso fuera poco, ni bien empezaron los segundo 45 minutos, Wílchez se despachó con un golazo. Quedó mano a mano con Nico Sánchez, lo dejó en el camino, y la metió en el palo más lejano de Saja. Era 3 a 0 al minuto de juego de la segunda parte y partido liquidado. Luego, habría tiempo para que Itabel meta otro gol más y cerrase el resultado.
Un 4 a 0 que duele, pero que devuelve a Racing a la realidad y le permite pensar con mayor claridad a falta de 16 fechas por disputar. A Tigre, entre tanto, el resultado lo ilusiona y, si sigue jugando así, puede meterse en la pelea.
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