Se trata de Claudia, quien hasta ayer era buscada junto a su esposo y sus dos hijos; los encontraron en Santa Teresita y ella quedó detenida.
Claudia Ercoreca, la mujer que ayer fue detenida en Santa Teresita sospechada por el crimen de su madre, se negó a declarar ante el titular de la Unidad Funcional Temática de Homicidios de La Matanza, Carlos Arribas, quien la indagó por el delito de "homicidio calificado por el vínculo".
Así lo confirmaron a Télam fuentes judiciales, que añadieron que tras la indagatoria, el fiscal ordenó el traslado de la imputada a la Asesoría Pericial de La Matanza, para que sea sometida a peritajes médicos y psicológicos.
Claudia, su marido, Germán Fitzi, y sus hijos de 2 y 3 años fueron encontraron ayer en Santa Teresita, luego de que familiares de Fitzi los denunciaran como desaparecidos, porque no tenían noticias de ellos desde diciembre.
Cuando fueron hallados, Claudia quedó detenida por la muerte de su madre, Lida Frachini (76), en circunstancias confusas que son materia de investigación. ,El cadáver había sido encontrado la madrugada del sábado último en su departamento del 5to. piso de un edificio situado en Chacabuco al 328 de Ramos Mejía, en el oeste del conurbano.
Según se pudo reconstruir, Frachini había sufrido a principios de noviembre pasado un asalto en la vía pública en Morón, donde la golpearon en el rostro y le lesionaron la mandíbula, a raíz de lo cual permaneció internada en una clínica hasta principios de diciembre.
Tras recibir el alta, la anciana quedó al cuidado de su hija en la casa que ésta habitaba junto a su esposo e hijos en Alicante al 1819, de la localidad de Isidro Casanova, también en La Matanza, pero el 28 de diciembre, por problemas de salud volvió a ser hospitalizada.
En es situación permaneció hasta el 7 de enero, cuando nuevamente le dieron el alta pero esta vez no se quedó en la casa de su hija, sino que se fue a su departamento de Ramos Mejía.
La semana pasada, vecinos vieron a Ercoreca salir del departamento de su madre en Ramos Mejía con una bolsas de consorcio, mientras que 48 horas más tarde, la ahora acusada regresó al inmueble y dijo a los testigos que encontró a Frachini muerta.
Ercoreca se dirigió junto a unos vecinos a la comisaría de Ramos Mejía donde alertó que su madre había fallecido, al parecer, por causas "naturales", e inmediatamente dijo que se iba a buscar un médico y una cochería para velarla.
Como la mujer no regresó, el personal policial se dirigió en las primeras horas del sábado al departamento de la mujer y halló el cadáver en avanzado estado de descomposición.
"A simple vista no se advertían lesiones", describió un investigador y agregó que luego la autopsia determinó que Frachini había muerto por golpes en cuero cabelludo, cuello y tórax y que estos traumatismos eran actuales y no estaban relacionados con las heridas sufridas en el asalto en Morón.
Además, los forenses estimaron la data de muerte en más de 72 horas antes del hallazgo del cadáver, por lo que el crimen ocurrió el miércoles 20 de enero, mismo día en que los testigos dijeron haber visto allí a la hija de la víctima.
Claudia Ercoreca, la mujer que ayer fue detenida en Santa Teresita sospechada por el crimen de su madre, se negó a declarar ante el titular de la Unidad Funcional Temática de Homicidios de La Matanza, Carlos Arribas, quien la indagó por el delito de "homicidio calificado por el vínculo".
Así lo confirmaron a Télam fuentes judiciales, que añadieron que tras la indagatoria, el fiscal ordenó el traslado de la imputada a la Asesoría Pericial de La Matanza, para que sea sometida a peritajes médicos y psicológicos.
Claudia, su marido, Germán Fitzi, y sus hijos de 2 y 3 años fueron encontraron ayer en Santa Teresita, luego de que familiares de Fitzi los denunciaran como desaparecidos, porque no tenían noticias de ellos desde diciembre.
Cuando fueron hallados, Claudia quedó detenida por la muerte de su madre, Lida Frachini (76), en circunstancias confusas que son materia de investigación. ,El cadáver había sido encontrado la madrugada del sábado último en su departamento del 5to. piso de un edificio situado en Chacabuco al 328 de Ramos Mejía, en el oeste del conurbano.
Según se pudo reconstruir, Frachini había sufrido a principios de noviembre pasado un asalto en la vía pública en Morón, donde la golpearon en el rostro y le lesionaron la mandíbula, a raíz de lo cual permaneció internada en una clínica hasta principios de diciembre.
Tras recibir el alta, la anciana quedó al cuidado de su hija en la casa que ésta habitaba junto a su esposo e hijos en Alicante al 1819, de la localidad de Isidro Casanova, también en La Matanza, pero el 28 de diciembre, por problemas de salud volvió a ser hospitalizada.
En es situación permaneció hasta el 7 de enero, cuando nuevamente le dieron el alta pero esta vez no se quedó en la casa de su hija, sino que se fue a su departamento de Ramos Mejía.
La semana pasada, vecinos vieron a Ercoreca salir del departamento de su madre en Ramos Mejía con una bolsas de consorcio, mientras que 48 horas más tarde, la ahora acusada regresó al inmueble y dijo a los testigos que encontró a Frachini muerta.
Ercoreca se dirigió junto a unos vecinos a la comisaría de Ramos Mejía donde alertó que su madre había fallecido, al parecer, por causas "naturales", e inmediatamente dijo que se iba a buscar un médico y una cochería para velarla.
Como la mujer no regresó, el personal policial se dirigió en las primeras horas del sábado al departamento de la mujer y halló el cadáver en avanzado estado de descomposición.
"A simple vista no se advertían lesiones", describió un investigador y agregó que luego la autopsia determinó que Frachini había muerto por golpes en cuero cabelludo, cuello y tórax y que estos traumatismos eran actuales y no estaban relacionados con las heridas sufridas en el asalto en Morón.
Además, los forenses estimaron la data de muerte en más de 72 horas antes del hallazgo del cadáver, por lo que el crimen ocurrió el miércoles 20 de enero, mismo día en que los testigos dijeron haber visto allí a la hija de la víctima.
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