Miles de personas marcharon anoche por la capital, Ereván, para respaldar a un grupo de rebeldes que tomaron una comisaría en repudio al gobierno. Hubo fuertes choques con la policía.
Un policía murió, 165 manifestantes fueron detenidos y 60 resultaron heridos en Ereván, Armenia, a raíz de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y simpatizantes de un grupo rebelde opositor que se encuentra atrincherado en una comisaría céntrica.
El policía fue asesinado por un francotirador rebelde desde la comisaría tomada, cuando se hallaba en un auto a 300 metros del lugar, según informó el vocero de la policía, Achot Aharonian.
Una veintena de hombres armados, partidarios del opositor encarcelado Jirair Sefilian, coparon la comisaría el 17 de julio, matando a un policía y tomando varios rehenes. Los atacantes reclaman la dimisión del presidente prorruso Serge Sarkissian.
Desde entonces liberaron a los policías, pero mantienen como rehenes a tres miembros del personal médico que ingresaron el miércoles pasado a brindar ayuda.
Ayer hubo una marcha en respaldo de los rebeldes, que terminó en fuertes choques con la policía. Dos de los heridos se encuentran en estado grave, uno con quemaduras y otro con problemas en los ojos, informó a medios locales la portavoz del Ministerio de Sanidad armenio, Anait Aitayán.
Al igual que a lo largo de toda la última semana, miles de personas salieron anoche a las calles de la capital aremnia en solidaridad con los rebeldes que tomaron la comisaria.
Tras celebrar un mitin, cientos de manifestantes rompieron el cordón policial que rodea el territorio de la comisaría y se acercaron al edificio tomado por los secuestradores. La policía respondió con una carga contra los manifestantes y empleó granadas aturdidoras para dispersar a la muchedumbre.
Un policía murió, 165 manifestantes fueron detenidos y 60 resultaron heridos en Ereván, Armenia, a raíz de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y simpatizantes de un grupo rebelde opositor que se encuentra atrincherado en una comisaría céntrica.
El policía fue asesinado por un francotirador rebelde desde la comisaría tomada, cuando se hallaba en un auto a 300 metros del lugar, según informó el vocero de la policía, Achot Aharonian.
Una veintena de hombres armados, partidarios del opositor encarcelado Jirair Sefilian, coparon la comisaría el 17 de julio, matando a un policía y tomando varios rehenes. Los atacantes reclaman la dimisión del presidente prorruso Serge Sarkissian.
Desde entonces liberaron a los policías, pero mantienen como rehenes a tres miembros del personal médico que ingresaron el miércoles pasado a brindar ayuda.
Ayer hubo una marcha en respaldo de los rebeldes, que terminó en fuertes choques con la policía. Dos de los heridos se encuentran en estado grave, uno con quemaduras y otro con problemas en los ojos, informó a medios locales la portavoz del Ministerio de Sanidad armenio, Anait Aitayán.
Al igual que a lo largo de toda la última semana, miles de personas salieron anoche a las calles de la capital aremnia en solidaridad con los rebeldes que tomaron la comisaria.
Tras celebrar un mitin, cientos de manifestantes rompieron el cordón policial que rodea el territorio de la comisaría y se acercaron al edificio tomado por los secuestradores. La policía respondió con una carga contra los manifestantes y empleó granadas aturdidoras para dispersar a la muchedumbre.
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