La canciller Angela Merkel se reunió con sus ministros y tomó la decisión de enviar aviones de combate tipo Tornado a Siria
Tras los atentados del 13 de noviembre en París, por los que murieron al menos 130 personas y más de 300 resultaron heridas, el presidente de Francia François Hollande se mostró firme: está convencido que la única forma de derrotar a Estado Islámico es con la ayuda de una coalición internacional fuerte, que agrupe a la mayor cantidad de países posible.
Con este objetivo en mente, Hollande se reunió el martes con el presidente estadounidense Barack Obama y hoy tiene pensado hacer lo mismo con su par ruso, Vladimir Putin.
Mientras tanto, David Cameron confirmó que su fuerza aérea también formará parte de los bombardeos que Occidente lleva a cabo en Siria para terminar con la amenaza del grupo extremista, que en varios videos difundidos en las últimas semanas asegura que Washington, Roma y París, otra vez, están entre sus objetivos a atacar.
A este listado de países decididos a atacar los centros estratégicos de los terroristas se suma ahora Alemania.
Tras una reunión entre la canciller Angela Merkel y sus funcionarios, el gobierno alemán decidió que su Ejército enviara aviones de combate tipo Tornado a Siria para misiones de reconocimiento y un buque de guerra para luchar contra el Estado Islámico, según DPA. El barco contará con al menos un avión cisterna y un sistema de reconocimiento por satélite.
Los grupos parlamentarios del Bundestag alemán debatirán hasta esta tarde las propuestas para la mayor implicación de Alemania en la lucha contra la milicia del EI en Siria.
Tanto el grupo democristiano de Merkel como sus socios socialdemócratas en la coalición de gobierno convocaron sendas reuniones con el título "Apoyo a Francia en la lucha contra el terrorismo".
El Ejército alemán está presente actualmente en 16 misiones militares con cerca de 3.000 soldados en 14 países. Sin embargo, ninguna de estas misiones ha llegado tan lejos como los planes actuales del gobierno para combatir al grupo extremista en Siria e Irak.
Tras los atentados del 13 de noviembre en París, por los que murieron al menos 130 personas y más de 300 resultaron heridas, el presidente de Francia François Hollande se mostró firme: está convencido que la única forma de derrotar a Estado Islámico es con la ayuda de una coalición internacional fuerte, que agrupe a la mayor cantidad de países posible.
Con este objetivo en mente, Hollande se reunió el martes con el presidente estadounidense Barack Obama y hoy tiene pensado hacer lo mismo con su par ruso, Vladimir Putin.
Mientras tanto, David Cameron confirmó que su fuerza aérea también formará parte de los bombardeos que Occidente lleva a cabo en Siria para terminar con la amenaza del grupo extremista, que en varios videos difundidos en las últimas semanas asegura que Washington, Roma y París, otra vez, están entre sus objetivos a atacar.
A este listado de países decididos a atacar los centros estratégicos de los terroristas se suma ahora Alemania.
Tras una reunión entre la canciller Angela Merkel y sus funcionarios, el gobierno alemán decidió que su Ejército enviara aviones de combate tipo Tornado a Siria para misiones de reconocimiento y un buque de guerra para luchar contra el Estado Islámico, según DPA. El barco contará con al menos un avión cisterna y un sistema de reconocimiento por satélite.
Los grupos parlamentarios del Bundestag alemán debatirán hasta esta tarde las propuestas para la mayor implicación de Alemania en la lucha contra la milicia del EI en Siria.
Tanto el grupo democristiano de Merkel como sus socios socialdemócratas en la coalición de gobierno convocaron sendas reuniones con el título "Apoyo a Francia en la lucha contra el terrorismo".
El Ejército alemán está presente actualmente en 16 misiones militares con cerca de 3.000 soldados en 14 países. Sin embargo, ninguna de estas misiones ha llegado tan lejos como los planes actuales del gobierno para combatir al grupo extremista en Siria e Irak.
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