En un final caliente, Independiente logró una agónica victoria ante Talleres por 3 a 2

El Rojo, con la vuelta de Pablo Pérez, ganaba con goles de Cecilio Domínguez y Sánchez Miño, pero la T lo igualó con Tenaglia y Godoy y el Libertadores de América estalló en bronca. Al final, Figal puso el 3-2 pero el clima quedó enrarecido.



En un partido lleno de condimentos y con un final dramático, Independiente le ganó esta noche sobre el final a Talleres de Córdoba 3 a 2, en el estadio Libertadores de América, por la octava fecha de la Superliga.

El Rojo había mostrado una gran mejoría en el juego y lo ganaba cómodo 2-0, por las conquistas del paraguayo Cecilio Domínguez y Juan Sánchez Miño. Pero, de forma inesperada, Talleres reaccionó y aprovechó dos fallas defensivas del rival para igualar, gracias a los tantos de Nahuel Tenaglia y Leonardo Godoy.



Allí, el estadio fue un hervidero y los hinchas cambiaron los aplausos del primer tiempo por los insultos de la parte final.

En tiempo adicionado, apareció Nicolás Figal para aprovechar un cabezazo y decretar el 3-2, en un cierre muy caliente en Avellaneda.La T no pudo lograr el triunfo para tomar la punta del torneo y terminó con diez por la expulsión de Lautaro Guzmán.

Desde el inicio, el Rojo salió con enjundia a presionar alto y a no dejar pensar a los cordobeses. La primera chance de riesgo la tuvo el local en 19, con un tiro libre de Domínguez que sacó muy bien el arquero Herrera.

Talleres recién pudo salir del asedio de Independiente en 31, cuando Menéndez desniveló por izquierda y la mandó adentro para que Bustos define apenas afuera.

Tres más tarde, Independiente presionó bien en la salida de Talleres y la pelota la capturó por derecha Pérez, quien llegó al fondo y tiró el centro al medio para la aparición del paraguayo Domínguez y el toque al fondo de la red.

En los minutos finales, se retiró lesionado Silvio Romero, lo reemplazó Palacios, y quedaba algo más para cerrar un buen primer tiempo del Rojo. El arquero Herrera salió lejos a despejar una pelota y chocó cn Tenaglia, la pelota le cayó a Sánchez Miño, quien tocó para el 2-0.

Talleres intentó salir un poco más en el segundo período y a los 13, luego de un error de Bustos, Figal salvó sobre la línea ante Menéndez.

Pese a la chance anterior, Independiente continuó con su claro dominio y en 25, llegó con firmeza, con una gran jugada del uruguayo Silva por izquierda, que terminó con centro y definición de Blanco que pegó en el travesaño.

Cuando menos se esperaba, Talleres acertó un cabezazo de Tenaglia y descontó, a los 34, para agregarle una cuota de dramatismo a un partido que parecía terminado.

Impulsado por el gol, Talleres fue por más ante un Independiente que físicamente sintió haber jugado el último jueves casi con el mismo equipo por Copa Argentina.

En este contexto, Godoy aprovechó otra salida en faldo del arquero Campaña y de cabezazo conectó un centro enviado desde la izquierda para decretar el 2-2, en 42 minutos.

Los insultos se hicieron presente en el estadio de parte de los hinchas del Rojo y los jugadores, a puro amor propio, fueron a buscar la victoria y la consiguieron a los 46, con un cabezazo de Figal, luego de un centro de Palacios.




 


Comentá

Artículo Anterior Artículo Siguiente