El Ciclón supo cuidar de manera perfecta su gran ventaja en la ida y pese a caer por la mínima en La Paz, está a 180 minutos del título con el que sueña todos los días.
San Lorenzo está a 180 minutos de su máximo anhelo histórico. Su rival será Nacional de Paraguay y si se impone, tendrá en su vitrina la Copa Libertadores. Después de 54 años, vuelve a la final del certamen después de caer 1 a 0 en La Paz ante Bolívar, pero gracias al aplastante 5 a 0 de la ida.
Con la obvia necesidad de conseguir una enorme goleada, la Academia salió a presionar al Ciclón y en pocos minutos consiguió sus primeras situaciones de gol, con remates de Tenorio afuera y de Capdevilla al palo. Apenas comenzaba el encuentro y la visita ya se sentía ahogado no tanto por la altura sino por la presión del dueño de casa.
El siguiente tramo fue a la medida azulgrana: salidas rápidas y obligar a la falta para la pelota parada. Llegado el minuto 36 fue la primera clara de Piatti, bien despejada por Quiñónez. Del comienzo complicado al cierre del primer tiempo cómodo, San Lorenzo logró acomodarse en el Hernando Siles, más allá de la salida del campo de juego entre piedras de los hinchas.
La segunda mitad comenzó demasiado cerca de Torrico, nuevamente por la necesidad casi utópica de conseguir cinco goles de Bolívar. Chávez se lo perdió a pocos metros del arco, luego Torrico tuvo que cortar un centro peligroso y de nuevo el 1 la desvió al corner ante un remate de Arce.
El reloj marcaba 59 minutos cuando el Cuervo logró pasar la línea media en el segundo tiempo, con una escapada de Blandi que terminó en Piatti, bien interrumpido por dos defensores. Un par de segundos duró la tranquilidad y nuevamente Torrico tuvo que salir rápido para tapar a Tenorio. Ya casi resignado, los bolivianos buscaban al menos el del honor.
Para cerrar el encuentro y darle descanso a los más agotados, Bauza mandó a la cancha a Barrientos y Fontanini. Bolívar prácticamente se resignó y su intento por llegar al gol se redujo a protestar supuestos penales. A falta de cinco minutos, otra vez Torrico contrarrestó a la altura ante un tiro de Cardozo que se movía en el aire.
A los 91 llegó el buscado tanto de Bolívar a través de Yecerotte. Obviamente muy tarde porque la gran goleada 5 a 0 de la ida pone a San Lorenzo en la ansiada final de la Copa Libertadores, que definirá las próximas dos semanas ante Nacional de Paraguay.
Fuente: Goal.com
San Lorenzo está a 180 minutos de su máximo anhelo histórico. Su rival será Nacional de Paraguay y si se impone, tendrá en su vitrina la Copa Libertadores. Después de 54 años, vuelve a la final del certamen después de caer 1 a 0 en La Paz ante Bolívar, pero gracias al aplastante 5 a 0 de la ida.
Con la obvia necesidad de conseguir una enorme goleada, la Academia salió a presionar al Ciclón y en pocos minutos consiguió sus primeras situaciones de gol, con remates de Tenorio afuera y de Capdevilla al palo. Apenas comenzaba el encuentro y la visita ya se sentía ahogado no tanto por la altura sino por la presión del dueño de casa.
El siguiente tramo fue a la medida azulgrana: salidas rápidas y obligar a la falta para la pelota parada. Llegado el minuto 36 fue la primera clara de Piatti, bien despejada por Quiñónez. Del comienzo complicado al cierre del primer tiempo cómodo, San Lorenzo logró acomodarse en el Hernando Siles, más allá de la salida del campo de juego entre piedras de los hinchas.
La segunda mitad comenzó demasiado cerca de Torrico, nuevamente por la necesidad casi utópica de conseguir cinco goles de Bolívar. Chávez se lo perdió a pocos metros del arco, luego Torrico tuvo que cortar un centro peligroso y de nuevo el 1 la desvió al corner ante un remate de Arce.
El reloj marcaba 59 minutos cuando el Cuervo logró pasar la línea media en el segundo tiempo, con una escapada de Blandi que terminó en Piatti, bien interrumpido por dos defensores. Un par de segundos duró la tranquilidad y nuevamente Torrico tuvo que salir rápido para tapar a Tenorio. Ya casi resignado, los bolivianos buscaban al menos el del honor.
Para cerrar el encuentro y darle descanso a los más agotados, Bauza mandó a la cancha a Barrientos y Fontanini. Bolívar prácticamente se resignó y su intento por llegar al gol se redujo a protestar supuestos penales. A falta de cinco minutos, otra vez Torrico contrarrestó a la altura ante un tiro de Cardozo que se movía en el aire.
A los 91 llegó el buscado tanto de Bolívar a través de Yecerotte. Obviamente muy tarde porque la gran goleada 5 a 0 de la ida pone a San Lorenzo en la ansiada final de la Copa Libertadores, que definirá las próximas dos semanas ante Nacional de Paraguay.
Fuente: Goal.com
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