Un hat-trick de Cristiano Ronaldo le dio al equipo de Ancelotti el 3-2 ante Sevilla para que la pelea por el título sea vibrante hasta el final.
El futuro de la Liga se decidía en el Ramón Sánchez Pizjuán. Real Madrid se jugaba medio título ante Sevilla en su partido más complicado de los cuatro que restan para el final del campeonato. Los blancos sabían que no podían permitirse un tropiezo después de la goleada del Barça si querían mantener intactas sus opciones de quedarse con el título. Enfrente estaba el poderoso Sevilla de Emery, que se jugaba su presencia en la próxima Champions y que encadenaba 34 partidos sin perder en su estadio.
Desde el inicio se vio un partido cargado de intensidad por parte de ambos conjuntos. A los 15 segundos llegaba el primer remate del partido a cargo de Reyes e inmediatamente respondía Cristiano con un libre directo que se marchó por encima del travesaño. El Madrid iba creciendo en el partido a base de ensanchar el campo moviendo la pelota de un lado a otro. El gol estuvo muy cerca, pero Sergio Rico sacó de manera espléndida un remate de CR7, que ya estaba celebrando el tanto. Sevilla no se acongojaba y también estuvo cerca del gol en un remate de Aleix Vidal que alcanzó a tocar con lo justo Casillas pera evitarlo. No había tregua sobre el campo y el ritmo del partido era vertiginoso.
El Madrid dominaba y gozaba de una mayor posesión pero Sevilla creaba mucho peligro cada vez que metía la contra. Sobre el final de la primera parte, Cristiano no pudo empujar un tiro de Chicharito y parecía que se le negaba el gol. Pero en apenas dos minutos, el portugués se encargó de callar muchas bocas. Aprovechando que Sevilla estaba con 10 por una hemorragia en la nariz de Krychowiak, Cristiano metió ¡dos goles en apenas dos minutos! para dejar el partido muy favorable a los merengues. CR7 aprovechó dos centros, uno desde la izquierda y otro desde la derecha, para acabar con su sequía goleadora.
La ventaja de los blancos no amilanó a Sevilla, que ya remontó un 0-2 a Barcelona. Todo hacía indicar que los de Ancelotti se marcharían al descanso con una cómoda ventaja pero una frivolidad innecesaria de Marcelo en el descuento terminó en un penal claro de Ramos sobre Aleix Vidal. Bacca se encargó de transformarlo engañando a Casillas para dar aire a su equipo de cara a la segunda mitad.
Tras el descanso, Sevilla salió con algo más de fuerza en busca del gol del empate. El Madrid no estaba nada cómodo con llegadas de los hispalenses pero, por suerte para los de Ancelotti, sólo duró los primeros 15 minutos. A partir de ahí el Madrid recuperó la sensación de tranquilidad ante el menor acoso de los de Emery. Incluso llegó a recuperar la ventaja de dos goles tras un soberbio cabezazo de Cristiano tras un centro de Bale, que entró por Chicharito. El luso conseguía recuperar el trono como el jugador con más hat-trick de la historia de la Liga (25) y ser el goleador del Torneo.
Con el 3-1, todo aputaba a que el Madrid mataría el partido de contra. Sin embargo, fue Sevilla quien recortó distancias con el gol de Iborra. En los últimos minutos el Madrid sufrió de lo lindo con la embestidas del Sevilla, pero el empate no terminó de llegar. Real Madrid consigue tres puntos vitales para mantener la lucha con Barcelona y corta la racha de Sevilla, de 34 partidos sin perder en su estadio.
El futuro de la Liga se decidía en el Ramón Sánchez Pizjuán. Real Madrid se jugaba medio título ante Sevilla en su partido más complicado de los cuatro que restan para el final del campeonato. Los blancos sabían que no podían permitirse un tropiezo después de la goleada del Barça si querían mantener intactas sus opciones de quedarse con el título. Enfrente estaba el poderoso Sevilla de Emery, que se jugaba su presencia en la próxima Champions y que encadenaba 34 partidos sin perder en su estadio.
Desde el inicio se vio un partido cargado de intensidad por parte de ambos conjuntos. A los 15 segundos llegaba el primer remate del partido a cargo de Reyes e inmediatamente respondía Cristiano con un libre directo que se marchó por encima del travesaño. El Madrid iba creciendo en el partido a base de ensanchar el campo moviendo la pelota de un lado a otro. El gol estuvo muy cerca, pero Sergio Rico sacó de manera espléndida un remate de CR7, que ya estaba celebrando el tanto. Sevilla no se acongojaba y también estuvo cerca del gol en un remate de Aleix Vidal que alcanzó a tocar con lo justo Casillas pera evitarlo. No había tregua sobre el campo y el ritmo del partido era vertiginoso.
El Madrid dominaba y gozaba de una mayor posesión pero Sevilla creaba mucho peligro cada vez que metía la contra. Sobre el final de la primera parte, Cristiano no pudo empujar un tiro de Chicharito y parecía que se le negaba el gol. Pero en apenas dos minutos, el portugués se encargó de callar muchas bocas. Aprovechando que Sevilla estaba con 10 por una hemorragia en la nariz de Krychowiak, Cristiano metió ¡dos goles en apenas dos minutos! para dejar el partido muy favorable a los merengues. CR7 aprovechó dos centros, uno desde la izquierda y otro desde la derecha, para acabar con su sequía goleadora.
La ventaja de los blancos no amilanó a Sevilla, que ya remontó un 0-2 a Barcelona. Todo hacía indicar que los de Ancelotti se marcharían al descanso con una cómoda ventaja pero una frivolidad innecesaria de Marcelo en el descuento terminó en un penal claro de Ramos sobre Aleix Vidal. Bacca se encargó de transformarlo engañando a Casillas para dar aire a su equipo de cara a la segunda mitad.
Tras el descanso, Sevilla salió con algo más de fuerza en busca del gol del empate. El Madrid no estaba nada cómodo con llegadas de los hispalenses pero, por suerte para los de Ancelotti, sólo duró los primeros 15 minutos. A partir de ahí el Madrid recuperó la sensación de tranquilidad ante el menor acoso de los de Emery. Incluso llegó a recuperar la ventaja de dos goles tras un soberbio cabezazo de Cristiano tras un centro de Bale, que entró por Chicharito. El luso conseguía recuperar el trono como el jugador con más hat-trick de la historia de la Liga (25) y ser el goleador del Torneo.
Con el 3-1, todo aputaba a que el Madrid mataría el partido de contra. Sin embargo, fue Sevilla quien recortó distancias con el gol de Iborra. En los últimos minutos el Madrid sufrió de lo lindo con la embestidas del Sevilla, pero el empate no terminó de llegar. Real Madrid consigue tres puntos vitales para mantener la lucha con Barcelona y corta la racha de Sevilla, de 34 partidos sin perder en su estadio.
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