"El Pipita" marcó los dos goles para la victoria por 2-1 de su equipo ante el Inter. Descontó Ljajic. El conjunto del sur de Italia le arrebató el liderazgo del certamen al elenco de Milán
San Paolo se vistió de gala para el mejor partido de la jornada en un día atípico, un lunes por la noche, donde Napoli e Inter se medían para conocer al que iba a ser líder de la Serie A.
Los napolitanos aparecieron pronto y antes del minuto 5 ya ganaban 1-0 gracias a un buen tanto de Gonzalo Higuaín, que terminó una buena jugada colectiva de los celestes.
El Inter aparecía de forma intermitente, sin crear demasiado peligro, y los locales dominaban y llegaban una y otra vez con un Insigne inspirado y un Marek Hamsik con destellos en la zona de tres cuartos. La situación para Mancini se puso aún más cuesta arriba cuando Nagatomo, tras una entrada infantil e innecesaria, se fue antes de tiempo a los vestuarios y condenando a los suyos.
En la segunda mitad, los de Sarri volvieron a salir con una gran intensidad y de nuevo el Pipa Higuaín aprovechó un despeje de Raúl Albiol para agarrar desprevenida a la defensa de Inter y vencer por alto a Handanovic. Golazo y doblete del ex-River que ya lleva 16 goles en 12 partidos.
Ljajic, sin embargo, consiguió acortar distancias para los suyos, cuando un buen disparo pegado al palo se convirtió en el 2-1. Los dueños de casa no supieron cerrar y controlar el final del partido, y los Nerazzurri pudieron haber empatado el encuentro y privar al Napoli del liderazgo en un centro a media altura que Icardi remató a quemarropa, pero se encontró con Pepe Reina, y un tiro al palo a los 93' que dejó en silencio a San Paolo.
Al final, Napoli consiguió tres puntos importantísimos para acomodarse en la cima del certamen, con 31 unidades, uno por encima de Inter, que ahora quedó como su escolta.
San Paolo se vistió de gala para el mejor partido de la jornada en un día atípico, un lunes por la noche, donde Napoli e Inter se medían para conocer al que iba a ser líder de la Serie A.
Los napolitanos aparecieron pronto y antes del minuto 5 ya ganaban 1-0 gracias a un buen tanto de Gonzalo Higuaín, que terminó una buena jugada colectiva de los celestes.
El Inter aparecía de forma intermitente, sin crear demasiado peligro, y los locales dominaban y llegaban una y otra vez con un Insigne inspirado y un Marek Hamsik con destellos en la zona de tres cuartos. La situación para Mancini se puso aún más cuesta arriba cuando Nagatomo, tras una entrada infantil e innecesaria, se fue antes de tiempo a los vestuarios y condenando a los suyos.
En la segunda mitad, los de Sarri volvieron a salir con una gran intensidad y de nuevo el Pipa Higuaín aprovechó un despeje de Raúl Albiol para agarrar desprevenida a la defensa de Inter y vencer por alto a Handanovic. Golazo y doblete del ex-River que ya lleva 16 goles en 12 partidos.
Ljajic, sin embargo, consiguió acortar distancias para los suyos, cuando un buen disparo pegado al palo se convirtió en el 2-1. Los dueños de casa no supieron cerrar y controlar el final del partido, y los Nerazzurri pudieron haber empatado el encuentro y privar al Napoli del liderazgo en un centro a media altura que Icardi remató a quemarropa, pero se encontró con Pepe Reina, y un tiro al palo a los 93' que dejó en silencio a San Paolo.
Al final, Napoli consiguió tres puntos importantísimos para acomodarse en la cima del certamen, con 31 unidades, uno por encima de Inter, que ahora quedó como su escolta.
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