El ex oficial fue condenado por la muerte de la joven y la desaparición de Aída Amoroso, ocurridas en 2013.
El ex prefecto Walter Vinader fue condenado hoy a prisión perpetua por el homicidio de la joven Araceli Ramos, de 19 años, y la desaparición de la anciana Aída Amoroso, de 82, en la localidad bonaerense de Caseros, partido de Tres de Febrero, en 2013.
El Tribunal Oral Criminal 4 del partido bonaerense de San Martín encontró culpable al ex miembro de la fuerza de seguridad y le impuso una condena en sintonía con lo que habían solicitado la fiscalía y la querella. Ramos, de 19 años, concurrió a la casa de Amoroso -situada en la calle Puán 3754 de Caseros- para una entrevista laboral que resultó ser falsa, pero nunca regresó y varios días después su cadáver fue encontrado en un terreno de las avenidas Crovara y General Paz, atado con alambres y dentro de varias bolsas de residuos.
La sentencia coincide con el pedido tanto del fiscal Ernesto Faber, como el del abogado de la familia de la joven asesinada, Cristian Poletti. La joven salió de su casa de Loma Hermosa el 30 de septiembre de 2013 para dirigirse a una supuesta entrevista laboral y antes de hacerlo le dejó a su madre una nota con la dirección de la cita, que con el correr de la investigación se constituiría en una pista fundamental para la resolución del crimen.
La joven fue obligada a grabar un video en el que involucró a la ex mujer de Vinader y a dos policías bonaerenses en el crimen de Fernández. Los investigadores después establecieron que todo se trató de un plan orquestado por el ex prefecto para vengarse de la ex y de los dos oficiales, quienes lo habían detenido en la localidad bonaerense de Suipacha por una causa por extorsión por la que luego fue condenado.
Su cuerpo fue encontrado 12 días después en un descampado ubicado en avenida Crovara y General Paz, en Villa Madero, y la autopsia determinó que había sido estrangulada y tenía golpes.
El ex prefecto Walter Vinader fue condenado hoy a prisión perpetua por el homicidio de la joven Araceli Ramos, de 19 años, y la desaparición de la anciana Aída Amoroso, de 82, en la localidad bonaerense de Caseros, partido de Tres de Febrero, en 2013.
El Tribunal Oral Criminal 4 del partido bonaerense de San Martín encontró culpable al ex miembro de la fuerza de seguridad y le impuso una condena en sintonía con lo que habían solicitado la fiscalía y la querella. Ramos, de 19 años, concurrió a la casa de Amoroso -situada en la calle Puán 3754 de Caseros- para una entrevista laboral que resultó ser falsa, pero nunca regresó y varios días después su cadáver fue encontrado en un terreno de las avenidas Crovara y General Paz, atado con alambres y dentro de varias bolsas de residuos.
La sentencia coincide con el pedido tanto del fiscal Ernesto Faber, como el del abogado de la familia de la joven asesinada, Cristian Poletti. La joven salió de su casa de Loma Hermosa el 30 de septiembre de 2013 para dirigirse a una supuesta entrevista laboral y antes de hacerlo le dejó a su madre una nota con la dirección de la cita, que con el correr de la investigación se constituiría en una pista fundamental para la resolución del crimen.
La joven fue obligada a grabar un video en el que involucró a la ex mujer de Vinader y a dos policías bonaerenses en el crimen de Fernández. Los investigadores después establecieron que todo se trató de un plan orquestado por el ex prefecto para vengarse de la ex y de los dos oficiales, quienes lo habían detenido en la localidad bonaerense de Suipacha por una causa por extorsión por la que luego fue condenado.
Su cuerpo fue encontrado 12 días después en un descampado ubicado en avenida Crovara y General Paz, en Villa Madero, y la autopsia determinó que había sido estrangulada y tenía golpes.
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