La versión remozada del teléfono que arrasó en 2000 será presentada en Barcelona
Antes de los smartphones con redes sociales y cámara frontal para selfies, existió un modelo de teléfono celular que se caracterizó por su poderosa batería y su carcaza “indestructible”: el Nokia 3310.
Este teléfono -que ante la miraba de los adolescentes podría ser calificado como primitivo-volverá al mercado, 17 años después de su primer lanzamiento, y será presentado oficialmente en el marco del Congreso de Móviles en Barcelona, evento que tendrá lugar a partir del 27 de febrero.
El 3310 es un modelo clásico, rectangular, con una pantalla monocroma de 84 x 84 puntos, y fue uno de los teléfonos más populares entre la generación de los "Millennials" (los nacidos entre 1981 y 1995).
El sencillo dispositivo está lejos de los smartphones actuales, dotados con cámaras frontales para inundar de selfies las redes sociales y aplicaciones para todos los gustos. Entre sus funciones se destaca una calculadora, una función de recordatorios y un cronómetro, además de la posibilidad de marcar un número telefónico por voz.
Según recordaron medios especializados, el teléfono traía cuatro juegos: Snake II, Pairs II, Space Impact, y Bantumi.
Si bien la empresa había dejado de fabricarlo años atrás, aún podía adquirirse en plataformas de comercio online como Amazon, Marketplace o eBay.
Se estima que el valor de venta por cada equipo rondará 60 euros.
Antes de los smartphones con redes sociales y cámara frontal para selfies, existió un modelo de teléfono celular que se caracterizó por su poderosa batería y su carcaza “indestructible”: el Nokia 3310.
Este teléfono -que ante la miraba de los adolescentes podría ser calificado como primitivo-volverá al mercado, 17 años después de su primer lanzamiento, y será presentado oficialmente en el marco del Congreso de Móviles en Barcelona, evento que tendrá lugar a partir del 27 de febrero.
El 3310 es un modelo clásico, rectangular, con una pantalla monocroma de 84 x 84 puntos, y fue uno de los teléfonos más populares entre la generación de los "Millennials" (los nacidos entre 1981 y 1995).
El sencillo dispositivo está lejos de los smartphones actuales, dotados con cámaras frontales para inundar de selfies las redes sociales y aplicaciones para todos los gustos. Entre sus funciones se destaca una calculadora, una función de recordatorios y un cronómetro, además de la posibilidad de marcar un número telefónico por voz.
Según recordaron medios especializados, el teléfono traía cuatro juegos: Snake II, Pairs II, Space Impact, y Bantumi.
Si bien la empresa había dejado de fabricarlo años atrás, aún podía adquirirse en plataformas de comercio online como Amazon, Marketplace o eBay.
Se estima que el valor de venta por cada equipo rondará 60 euros.
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