El Merengue empató en su casa 2 a 2 con el Bayern y, por su victoria en Alemania, jugará una nueva final europea. Tremendo partido en el Bernabeu.
El Real Madrid selló el pase a la final de la Liga de Campeones 2017-18 después de empatar este martes ante el Bayern de Múnich en el Santiago Bernabéu (2-2), en un partido intenso desde el primer minuto y en el que los de Zinédine Zidane jugaron con fuego, pero en el que los dos tantos de Karim Benzema y la labor de un excepcional Keylor Navas les permitieron seguir soñando con alcanzar la decimotercera en Kiev.
El tanto del lateral derecho Joshua Kimmich en el minuto 3 hacía presagiar un partido de tensión en el coliseo blanco, una caldera en busca de la tercera final consecutiva. Los dos tantos del francés Karim Benzema, el segundo de ellos nada más reanudarse el choque tras un error infantil del guardameta Sven Ulreich, permitían al actual campeón respirar.
Sin embargo, en el 63, James Rodríguez, que anotaba y pedía perdón, silenciaba a su antigua afición y ponía al cuadro bávaro a un gol de la remontada. Emergió entonces la figura del costarricense Keylor Navas, que desbarató varias ocasiones claras del conjunto alemán para salvar a los suyos y, unido al favorable 2-1 de la ida, guiarles hasta la final de Kiev.
Así, el 26 de mayo, el Madrid buscará en la capital ucraniana su decimotercera 'Orejona', que podría ser la tercera consecutiva y la cuarta en los últimos cinco años, para seguir incrementando su dominio en el torneo continental. Liverpool o Roma será su rival.
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El Real Madrid selló el pase a la final de la Liga de Campeones 2017-18 después de empatar este martes ante el Bayern de Múnich en el Santiago Bernabéu (2-2), en un partido intenso desde el primer minuto y en el que los de Zinédine Zidane jugaron con fuego, pero en el que los dos tantos de Karim Benzema y la labor de un excepcional Keylor Navas les permitieron seguir soñando con alcanzar la decimotercera en Kiev.
El tanto del lateral derecho Joshua Kimmich en el minuto 3 hacía presagiar un partido de tensión en el coliseo blanco, una caldera en busca de la tercera final consecutiva. Los dos tantos del francés Karim Benzema, el segundo de ellos nada más reanudarse el choque tras un error infantil del guardameta Sven Ulreich, permitían al actual campeón respirar.
Sin embargo, en el 63, James Rodríguez, que anotaba y pedía perdón, silenciaba a su antigua afición y ponía al cuadro bávaro a un gol de la remontada. Emergió entonces la figura del costarricense Keylor Navas, que desbarató varias ocasiones claras del conjunto alemán para salvar a los suyos y, unido al favorable 2-1 de la ida, guiarles hasta la final de Kiev.
Así, el 26 de mayo, el Madrid buscará en la capital ucraniana su decimotercera 'Orejona', que podría ser la tercera consecutiva y la cuarta en los últimos cinco años, para seguir incrementando su dominio en el torneo continental. Liverpool o Roma será su rival.
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