En coincidencia con el paro general en todo el país, el presidente Mauricio Macri brindó en Nueva York su discurso ante la Asamblea General de la ONU y aseguró: "Sabíamos que el cambio no era fácil".
En su visita diplomática a Estados Unidos, el primer mandatario dijo que "nuestro país transita cambios profundos" y buscó despejar dudas sobre la economía argentina para restaurar la confianza del mercado internacional.
Más adelante, incluyó la cuestión Malvinas en su discurso y ratificó el "derecho legítimo e imprescriptible" de la Argentina a la soberanía: "Quiero reafirmar nuestros derechos legítimos e imprescriptibles sobre las Islas Malvinas", sostuvo, al tiempo que subrayó el "compromiso del Gobierno con esta nueva fase de la relación con el Reino Unido, basado en el confianza mutua diálogo amplio y positivo".
En sus palabras, el mandatario nacional hizo también referencia a la reunión de líderes del G-20 que el próximo 30 de noviembre se reunirá en la Argentina: "Será la primera Cumbre de Sudamérica que va a demostrar una vez más su vigencia y relevancia. La comunidad interna requiere compromisos efectivos y eficaces, diálogo y construcción de consensos".
Más adelante, reclamó a la República Islámica de Irán que "coopere" con la Justicia argentina por la causa AMIA y le pidió a los "países amigos" de la Argentina que "evite cobijar bajo inmunidad diplomática a cualquiera de los imputados".
"Nuestro país no cesará en su objetivo que lograr que todas las personas acusadas se presenten en tribunales argentinos sean interrogados y condenados", sostuvo Macri.
Ante la 73° Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente explicó la "preocupación" de la Argentina sobre la situación "de los derechos humanos en Venezuela", al tiempo que le reclamó al mandatario Nicolás Maduro "reconocer la crisis humanitaria" en ese país.
"Hacemos un llamado a que (Maduro) reconozca la crisis humanitaria y que atienda las fuertes carencias sanitarias de los desplazados", subrayó. A la vez, resaltó que la Argentina ya recibió "a 130.000 venezolanos" como parte de "una respuesta regional" a la situación de ese país.
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