A casi dos meses de las elecciones generales, el candidato presidencial Javier Milei cerró la décima edición de la Expo EFI, en donde compartió detalles de su próximo libro sobre economía. Aunque aclaró que lo iba a discutir eran temas de índole técnica, hizo énfasis que "sí tiene consecuencias en términos políticos". Negó la existencia de fallas de mercado dentro del capitalismo, responsabilizando en todas las instancias a la intervención estatal y adelantó que en su programa económico no se contempla una dolarización en términos exclusivos, sino una "libre competencia de monedas". Asimismo, negó necesitar el apoyo de que los empresarios en caso de ser electo. "¿Por qué necesito que me den una mano?", planteó.
Durante una exposición de una hora, Milei argumentó que muchas herramientas de análisis que utilizan los economistas "pueden ser funcionales para el socialismo y la degradación de la sociedad" y criticó a muchos colegas suyos por "abrazarse a un modelo y torturar a la realidad para que se parezca a ese modelo". Entre alguno de los temas que tocó, destacó la inexistencia de errores en un mercado. "Si hay un fallo de mercado es porque hay intervención estatal. Si revisaron y no hay intervención estatal, vuélvanse a fijar porque están equivocados".
Y fue más allá, argumentando que "los monopolios no son malos, pese a lo que diga la teoría económica" tradicional. En esa línea, agregó que existen economistas cercanos a los otros candidatos que "están en contra del progreso tecnológico". "Cuando aparece Thomas Edison con la lamparita, ¿cómo creen que se sentían los fabricantes de velas? Si yo tengo 10 empresas de celulares y una produce un celular con la mejor tecnología y más barato y las otras 9 se funden, ¿qué tiene de malo eso? A ese tipo le tengo que dar un premio porque es un benefactor social, no lo quiero regular", ejemplificó.
En otro momento, se lamentó de la "calidad precaria del debate" en Argentina, producto de que los economistas "perdieron la brújula de que el modelo es una versión simplificada de la realidad que tiene que marcar un camino" y citó el caso de su propuesta de dolarización. "En ese caso, que es una simplificación, hablamos de una competencia de monedas, de todas las que quieran". Más tarde, aclararía que suele hablar en términos de dolarizar porque "los argentinos eligieron el dólar históricamente y probablemente lo elijan".
Sostuvo que ese proceso "se va a hacer lo antes posible" y comentó que actualmente su equipo económico tiene cinco propuestas distintas. "Vamos a elegir y nos vamos a quedar con la que sea la más rápida. Una vez que la tenemos cerrada, ya desde el primer día nos mandamos", enfatizó.
Consultado sobre si temía un escenario similar al que enfrentó Mauricio Macri cuando perdió el favor de las cúpulas empresarias, respondió: "No necesito que nadie me dé la mano, ¿por qué necesito la mano de los empresarios? Voy a gobernar para 47 millones de argentinos y hacer cosas que beneficien a todos los argentinos, algunos estarán a favor y otros en contra".
También relató el encuentro que mantuvo con funcionarios del FMI, a quienes les desmintió la posibilidad de que vaya a implementar un Plan Bonex, "que implica avanzar sobre los derechos de propiedad", y les aseguró que pagará la deuda contraída por el gobierno de Cambiemos en 2018. "Los compromisos y los derechos de propiedad se respetan a rajatabla".
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