Ocurrió en Curitiba, en el sureño estado de Paraná. Docentes en huelga fueron reprimidos por no respetar el perímetro de las instalaciones del legislativo.
Un brutal enfrentamiento entre profesores y la prefectura de Brasil dejó un saldo de por lo menos 213 heridos en Curitiva, en el sureño estado brasileño Paraná, durante una protesta que se salió de control.
Según medios locales, los profesores, que se encuentran en huelga desde el sábado, y que también estuvieron de paro durante febrero y marzo, protestaban frente a la Asamblea Legislativa, que durante el atardecer aprobaba la modificación de una ley de seguridad social que afecta a funcionarios públicos. Los manifestantes temen perder beneficios y que el cambio debilite el sistema provisional.
Según los organizadores de la protesta, había en el lugar unas 20 mil personas. El momento de tensión comenzó cuando un grupo de manifestantes intento traspasar el perímetro de las instalaciones del legislativo, protegidas por una orden judicial, y la prefectura reprimió.
Hubo disparos de balas de goma y bombas de gas lacrimógeno, mientras que los manifestantes respondieron con palos y piedras.
Según la alcaldía de Curitiba, fueron socorridas 150 personas. Pero los medios de Brasil hablaban anoche de 213 heridos, en base a cifras de la propia Prefectura. 20 son oficiales.
Un brutal enfrentamiento entre profesores y la prefectura de Brasil dejó un saldo de por lo menos 213 heridos en Curitiva, en el sureño estado brasileño Paraná, durante una protesta que se salió de control.
Según medios locales, los profesores, que se encuentran en huelga desde el sábado, y que también estuvieron de paro durante febrero y marzo, protestaban frente a la Asamblea Legislativa, que durante el atardecer aprobaba la modificación de una ley de seguridad social que afecta a funcionarios públicos. Los manifestantes temen perder beneficios y que el cambio debilite el sistema provisional.
Según los organizadores de la protesta, había en el lugar unas 20 mil personas. El momento de tensión comenzó cuando un grupo de manifestantes intento traspasar el perímetro de las instalaciones del legislativo, protegidas por una orden judicial, y la prefectura reprimió.
Hubo disparos de balas de goma y bombas de gas lacrimógeno, mientras que los manifestantes respondieron con palos y piedras.
Según la alcaldía de Curitiba, fueron socorridas 150 personas. Pero los medios de Brasil hablaban anoche de 213 heridos, en base a cifras de la propia Prefectura. 20 son oficiales.
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