Fue en un control de rutina en el local vegetariano de avenida Córdoba al 1500. Encontraron graves fallas de higiene y seguridad.
Una inspección de rutina en un conocido restaurante vegetariano del Centro porteño terminó con una sorpresa ingrata. Es que los agentes del Gobierno porteño encontraron gran cantidad de cucarachas, entre otras faltas de higiene, y tuvieron que clausurarlo.
Desde la Agencia Gubernamental de Control porteña explicaron que la inspección se realizó en el restaurante vegetariano “Lotos”, un local de dos pisos sobre avenida Córdoba al 1500.
Allí, los inspectores "comprobaron la presencia de una enorme cantidad de vectores vivos y muertos (cucarachas) tanto en el sector de elaboración de los alimentos, como en la Planta Baja y el subsuelo del lugar", indicó la AGC en un comunicado. Además, los agentes constataron la falta de seis libretas sanitarias del personal.
"A raíz de que se encontraban afectadas las mínimas condiciones de higiene y de que se estaba poniendo en riesgo la salud de la población, se procedió a efectuar la clausura preventiva e inmediata del local y se colocaron dos fajas de interdicción", indicaron desde la AGC.
El titular del organismo, Juan José Gómez Centurión, señaló: “Nuestros operativos de proximidad demuestran, una vez más, que esta modalidad de cercanía con la gente y el territorio permiten detectar faltas como éstas, en lugares en los que por su apariencia externa parecieran cumplirse con los estándares de seguridad, pero que en realidad, al realizar los operativos, se demuestra que conllevan peligro para los posibles consumidores”.
Una inspección de rutina en un conocido restaurante vegetariano del Centro porteño terminó con una sorpresa ingrata. Es que los agentes del Gobierno porteño encontraron gran cantidad de cucarachas, entre otras faltas de higiene, y tuvieron que clausurarlo.
Desde la Agencia Gubernamental de Control porteña explicaron que la inspección se realizó en el restaurante vegetariano “Lotos”, un local de dos pisos sobre avenida Córdoba al 1500.
Allí, los inspectores "comprobaron la presencia de una enorme cantidad de vectores vivos y muertos (cucarachas) tanto en el sector de elaboración de los alimentos, como en la Planta Baja y el subsuelo del lugar", indicó la AGC en un comunicado. Además, los agentes constataron la falta de seis libretas sanitarias del personal.
"A raíz de que se encontraban afectadas las mínimas condiciones de higiene y de que se estaba poniendo en riesgo la salud de la población, se procedió a efectuar la clausura preventiva e inmediata del local y se colocaron dos fajas de interdicción", indicaron desde la AGC.
El titular del organismo, Juan José Gómez Centurión, señaló: “Nuestros operativos de proximidad demuestran, una vez más, que esta modalidad de cercanía con la gente y el territorio permiten detectar faltas como éstas, en lugares en los que por su apariencia externa parecieran cumplirse con los estándares de seguridad, pero que en realidad, al realizar los operativos, se demuestra que conllevan peligro para los posibles consumidores”.
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