El tenista de Manacor barrió en sets corridos al sudafricano Kevin Anderson y alzó su segundo Grand Slam del año. El número 1 del mundo fue imbatible y se acerca al récord de Federer.
No hubo sorpresas. El español Rafael Nadal se consagró por tercera vez en el Abierto de Estados Unidos tras batir en la final al sudafricano Kevin Anderson en sets corridos.
Nadal, primer cabeza de serie y número uno del mundo, se impuso a su rival por 6-3, 6-3 y 6-4 en un partido que se alargó 2 horas y 28 minutos, quedándose merecidamente con el título luego de formar parte de la mitad del cuadro claramente más dura. Su nivel quedó ratificado este domingo.
Nadal, que también obtuvo Roland Garros esta temporada, alcanzó así su tercer título de campeón en Nueva York (lo ganó en 2010 y 2013), en su vigésima tercera final de Grand Slam. Además, sumó su decimosexto título de Grand Slam, quedando a solo tres de Roger Federer, el máximo ganador entre los hombres en toda la historia.
De esta manera, se afianza en la cima del ranking mundial, al punto de distanciarse en 1960 puntos al propio Federer, su inmediato perseguidor.
Mientras tanto, Anderson tuvo su consuelo. El más alto en una final de Grand Slam en toda la historia fue el primer tenista sudafricano en llegar a una definición de estas características desde que lo hizo Kevin Curren, en la del Abierto de Australia de 1984. Mientras que el único africano que ganó un titulo de Grand Slam fue John Kriek en Melbourne 1981.
No hubo sorpresas. El español Rafael Nadal se consagró por tercera vez en el Abierto de Estados Unidos tras batir en la final al sudafricano Kevin Anderson en sets corridos.
Nadal, primer cabeza de serie y número uno del mundo, se impuso a su rival por 6-3, 6-3 y 6-4 en un partido que se alargó 2 horas y 28 minutos, quedándose merecidamente con el título luego de formar parte de la mitad del cuadro claramente más dura. Su nivel quedó ratificado este domingo.
Nadal, que también obtuvo Roland Garros esta temporada, alcanzó así su tercer título de campeón en Nueva York (lo ganó en 2010 y 2013), en su vigésima tercera final de Grand Slam. Además, sumó su decimosexto título de Grand Slam, quedando a solo tres de Roger Federer, el máximo ganador entre los hombres en toda la historia.
De esta manera, se afianza en la cima del ranking mundial, al punto de distanciarse en 1960 puntos al propio Federer, su inmediato perseguidor.
Mientras tanto, Anderson tuvo su consuelo. El más alto en una final de Grand Slam en toda la historia fue el primer tenista sudafricano en llegar a una definición de estas características desde que lo hizo Kevin Curren, en la del Abierto de Australia de 1984. Mientras que el único africano que ganó un titulo de Grand Slam fue John Kriek en Melbourne 1981.
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