Decenas de venezolanos han comenzado a concentrarse durante el día de hoy en varias zonas de Caracas y del interior del país, un día después del efímero levantamiento militar encabezado por el jefe del Parlamento opositor, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por medio centenar de naciones.
Las manifestaciones callejeras de este Primero de Mayo ya habían sido convocadas tanto por el Gobierno de Nicolás Maduro como por sus detractores, pero se han visto estimuladas por la jornada de ayer, cuando miles de personas participaron en protestas para respaldar la insurrección de un pequeño grupo de militares en Caracas.
Se prevé que Maduro ofrezca un discurso al término de la marcha que harán sus seguidores por el oeste de la capital venezolana. Guaidó, por su parte, continúa en paradero desconocido, pero ha reiterado su llamamiento a manifestarse hoy en las calles por el cese de la usurpación que considera hace Maduro de la presidencia.
Entretanto, el opositor Leopoldo López permanece dentro de la residencia del embajador español en Venezuela, Jesús Silva, adonde llegó la noche del martes para solicitar protección tras haber burlado el arresto domiciliario en que se encontraba, por estar cumpliendo desde 2014 una condena de casi 14 años.
Algunas calles y avenidas de Caracas muestran escombros y otros restos que dejaron las manifestaciones de la jornada del alzamiento militar, que se extendieron durante 12 horas y acabaron con cerca de 80 heridos, entre ellos ocho agentes de las fuerzas de seguridad leales a Maduro.
La ruta de la movilización opositora de este miércoles en Caracas sigue siendo desconocida, pero se presume que pretenda cruzar hacia el oeste de la ciudad, un territorio considerado bastión del chavismo gobernante y al que ayer les fue imposible llegar por los bloqueos impuestos en las vías por la policía. Entretanto, en el interior del país también se esperan una veintena de manifestaciones, mayoritariamente convocadas por el antichavismo.
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