La baja participación ciudadana registrada en las diferentes elecciones provinciales celebradas a la fecha, despertó alarmas en las filas de Unión por la Patria, desde donde tanto el ministro de Economía y precandidato presidencial, Sergio Massa, como el Gobernador bonaerense y precandidato a ir por la reelección, Axel Kicillof, en el tramo final de la campaña rumbo a las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), instaron a la dirigencia y la militancia, a ir "casa por casa" en busca de los votos
El desinterés demostrado por el electorado, sumado al desencanto ante las promesas electorales incumplidas por los diferentes espacios políticos, dejaron registros que despertaron alertas y es que en al menos cuatro de los distritos que ya eligieron gobernador, el índice de votantes no superó el 70 por ciento de los ciudadanos que concurrieron a emitir su sufragio.
Para el caso, en los comicios de Río Negro la concurrencia de ciudadanos que decidieron hacerse presentes en el cuarto oscuro llegó al 68,15%, mientras que en Córdoba, el índice se ubicó en el 68,27% y en Salta alcanzó el 69,46% del padrón electoral, mientras que en el caso de San Juan, se registró el número más bajo de concurrencia ciudadana, la que arañó el 60% de los votantes.
En tanto que en las PASO que tuvieron lugar el domingo 16 de julio pasado en la provincia de Santa Fe, el pico de votantes se ubicó en el 60,64% del padrón, mientras que en la elección de ayer, en la que se puso en disputa la intendente de la ciudad de Córdoba capital, se acercó a emitir su sufragio apenas el 60% de los ciudadanos.
Ante este escenario, el precandidato presidencial por UxP, Sergio Massa, aseguró en las últimas horas que "se puede ganar la elección" por más que las encuestas y el aparato de medios digan lo contrario, si se decide poner el cuerpo e ir "a buscar al vecino casa por casa".
En una entrevista concedida en la noche de ayer al canal C5N, al referirse al triunfo del candidato del peronismo cordobés, Daniel Pasarini, quien derrotó a su oponente de Juntos por el Cambio, Rodrigo De Loredo, quedándose de esa manera con la intendencia de la ciudad capital, el ministro de Economía, aseguró que dicha victoria se debió a que los dirigentes "salieron de atrás de los escritorios, fueron a abrazar a los vecinos", "a buscar a la gente, asumieron los errores y les dijeron 'vengan a cuidar córdoba'".
"Nosotros tenemos que ir a abrazar a los nuestros, pedirles perdón por nuestros errores y decirles 'vengan en agosto, no en octubre, vengan en agosto'", señaló Massa de manera enfática.
También el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, tomó nota de esta situación, lo que motivó que la semana pasada mantuviera reuniones con los intendentes de la primera y segunda sección electoral por separado y con los del interior del territorio bonaerense.
"Hay una preocupación lógica en torno a lo que siempre supimos, que la que viene no va a ser una elección fácil porque habrá una disputa punto a punto y voto a voto, lo que ha quedado demostrado en los últimos comicios como el de Córdoba, donde no hubo nada que te anticipe el resultado y no hay encuesta que valga", señaló una fuente de la Gobernación provincial consultada por BAE Negocios.
En ese contexto, el vocero indicó que lo único que pueden hacer es "estar cerca de la gente, mostrando gestión", por lo que Kicillof en el encuentro con los alcaldes "hizo mucho hincapié en el tema de la participación", en la necesidad "de ir casa por casa" a convencer "de que hay que ir a votar".
"Tenemos mucho potencial ahí porque son ciudadanos que nos votaron en 2019, pero los que están enojados o decepcionado con la gestión de Alberto (Fernández) o con el Gobierno nuestro, y es a los que hay que ir a buscar para que nos vuelvan a acompañar", señaló la fuente.
El funcionario indicó que están dispuestos "a rascar la olla" y harán todo lo que esté a su alcance en pos de sumar votos: "Sabemos que se juega mucho y nuestro objetivo es ser la fuerza más votada en las PASO".
En ese camino, el objetivo central de la campaña será el poner todo el poder de fuego electoral "en aquellos distritos donde estamos más parejos, entre ellos Mar del Plata, u otros municipios jodidos para nosotros, como lo son Junín, Bahía Blanca y Pergamino".
La baja participación electoral en Córdoba y Santa Fe puso a los estrategas de la campaña bonaerense en alerta, aunque ya habían advertido esa situación en los comicios de Chaco, en la primera elección que tuvo lugar en la provincia mediterránea y en San Juan: "Esto ha venido sucediendo a lo largo del año y es algo a lo que le estamos dando mucha importancia y es en lo que más hincapié viene haciendo" el Gobernador ante los jefes comunales.
La fuente indicó, además, que las encuestas tienen un comportamiento errático: "Una semana nos dicen que ganamos por diez puntos y otras que perdemos por diez, lo que es imposible", aunque refiere que sí vienen advirtiendo un patrón que se repite; el del "alto número de indecisos", aunque el verdadero indicador lo tienen en el día a día donde logran percibir "la apatía que hay en la gente durante las recorridas de campaña".
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