El conjunto de Mourinho, líder en la Liga Inglesa, se mide ante el Hull City a las 13, en condición de visitante. Desde las 10.30, el Manchester United disputa el clásico frente al Liverpool, en un partido clave para acortar la distancia contra el equipo de Londres.
El Chelsea viaja al KC Stadium con la idea clara de lograr tres puntos más ante un Hull City en caída libre. Los Blues, jugándose la Premier League -siendo el único título que les queda por jugar- y rozándola con la yema de los dedos tras aventajar al Manchester City en 6 puntos, aún con un partido menos y pudiendo distanciarse en 9, algo que podría suponer cantar el alirón a falta de un par de jornadas antes del final del campeonato.
Tras el empate ante el Southampton en Stamford Bridge, el conjunto de José Mourinho necesita retomar la senda de la victoria y olvidar definitivamente el batacazo de Champions League. Con los citizens dejándoles en bandeja de plata el título liguero, una victoria ante el Hull City supondría un paso más para alcanzar el objetivo de ganar la Premier League. Con una calidad de sobra y un desgaste físico que debería de haber desaparecido, los Blues son claros favoritos para llevarse los 3 puntos a Londres.
Delante tendrán a un Hull que mira por el retrovisor como están los puestos de descenso muy cerca de ellos. Con 28 puntos en su haber, se encuentra presionado con una diferencia de tan sólo 3 puntos por el Burnley, equipo que pone la frontera de la pérdida de la categoría con la permanencia en la división de oro de Inglaterra. En uno de sus exámenes más difíciles, pocas opciones tendrán los de Steve Bruce para conseguir algo positivo del partido.
La Premier League empieza a vestirse de azul, y el Chelsea no puede dormirse para evitar cualquier susto posible ante un milagroso resurgimiento del Manchester City. Una mala sorpresa ante el Hull podría suponer la diferencia entre la pérdida del título y cuajar una temporada calificable de fracaso con la consecución del trofeo regular y al menos cuajar una temporada aceptable.
El Chelsea viaja al KC Stadium con la idea clara de lograr tres puntos más ante un Hull City en caída libre. Los Blues, jugándose la Premier League -siendo el único título que les queda por jugar- y rozándola con la yema de los dedos tras aventajar al Manchester City en 6 puntos, aún con un partido menos y pudiendo distanciarse en 9, algo que podría suponer cantar el alirón a falta de un par de jornadas antes del final del campeonato.
Tras el empate ante el Southampton en Stamford Bridge, el conjunto de José Mourinho necesita retomar la senda de la victoria y olvidar definitivamente el batacazo de Champions League. Con los citizens dejándoles en bandeja de plata el título liguero, una victoria ante el Hull City supondría un paso más para alcanzar el objetivo de ganar la Premier League. Con una calidad de sobra y un desgaste físico que debería de haber desaparecido, los Blues son claros favoritos para llevarse los 3 puntos a Londres.
Delante tendrán a un Hull que mira por el retrovisor como están los puestos de descenso muy cerca de ellos. Con 28 puntos en su haber, se encuentra presionado con una diferencia de tan sólo 3 puntos por el Burnley, equipo que pone la frontera de la pérdida de la categoría con la permanencia en la división de oro de Inglaterra. En uno de sus exámenes más difíciles, pocas opciones tendrán los de Steve Bruce para conseguir algo positivo del partido.
La Premier League empieza a vestirse de azul, y el Chelsea no puede dormirse para evitar cualquier susto posible ante un milagroso resurgimiento del Manchester City. Una mala sorpresa ante el Hull podría suponer la diferencia entre la pérdida del título y cuajar una temporada calificable de fracaso con la consecución del trofeo regular y al menos cuajar una temporada aceptable.
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